*Datos proporcionados por el BCU*
Cotización 8 de diciembre de 2024 9:02 pm | USD promedio 43.45 | EURO promedio 45.94 | ARG promedio 0.04 | Real promedio 7.69
La última perspectiva a mediano plazo ha sido publicada por la Unión Europea (UE), con miras a 2032.
Se espera que la producción de carne vacuna en el bloque disminuya, y mantenga esa tendencia a 0,6 millones de toneladas (-9%) para 2032, con una disminución de 2,8 millones de cabezas (-9,1%) en el stock de vacas.
Además, estiman que continúe una ligera disminución en el consumo durante los próximos 10 años. Para 2032 el consumo de carne vacuna per cápita puede caer de 10,3 kilos a 9,5 kilos (-7,8%).
Está previsto que las exportaciones de carne vacuna de la UE crezcan en 2032 (+1,1 % anual), principalmente gracias a la continua demanda de sus socios comerciales. Los futuros acuerdos comerciales entre el Reino Unido y Australia/Estados Unidos (que no se tienen en cuenta en la base de referencia de la UE) podrían cambiar este panorama drásticamente.
Las importaciones de carne vacuna de la UE se recuperaron en 2022, tras las implicaciones del Brexit y del Covid-19. En los próximos años, las importaciones aumentarán lentamente y para 2032 se acercarán a los niveles anteriores a la pandemia.
Se espera que los precios de la carne vacuna se estabilicen en torno a los 4 euros por kilo.
Carne ovina
Contrariamente a las tendencias decrecientes de los últimos años, se espera que la producción de carne ovina y caprina en la UE aumente ligeramente (0,2% anual) hasta 2032, llegando a 645.000 toneladas.
El apoyo a los ingresos y una situación de oferta y demanda global ajustada, con precios favorables para los productores, deberían respaldar esta tendencia.
La producción permanecerá concentrada en unos pocos países seleccionados de la UE.
Se espera que el consumo per cápita de la UE se mantenga relativamente estable para 2032, en alrededor de 1,3 kilos por año.
Después de dos años de bajas en las exportaciones, debido al Brexit y a los altos precios internos, se espera que las exportaciones de carne ovina de la UE se recuperen en 2023/24 y alcancen las 60.000 toneladas para 2032.
Las importaciones del Reino Unido actualmente representan casi la mitad de las exportaciones de carne de la UE, y deberían permanecer estables como máximo. Existe mucha incertidumbre sobre el posible impacto de los acuerdos comerciales entre el Reino Unido y Australia/Nueva Zelanda en los mercados de la UE y el Reino Unido.
Las importaciones de la UE disminuirán ligeramente a 125.000 toneladas para 2032. Aunque la UE sigue siendo un destino de exportación atractivo, se prevé que Australia y Nueva Zelanda se centren más en los mercados asiáticos.
Después de los altos precios en 2021 y 2022, los precios de la UE comenzarán una tendencia a la baja, pero es probable que sigan siendo significativamente más altos que antes del Covid-19.
Un nuevo informe destaca el valor del comercio internacional de carne vacuna de Estados Unidos, un tema algo polémico desde que el Congreso derogó MCOOL (sello de USA en carne importada) en respuesta a una barrera comercial no arancelaria en 2015.
El informe establece que Estados Unidos es un importante exportador e importador de carne vacuna, y aunque los productores de ganado comercializan un solo producto básico (ganado), eventualmente se venden miles de productos diferentes.
Titulado Evaluación del impacto económico que seguiría a la pérdida de exportaciones e importaciones de carne vacuna de Estados Unidos, el proyecto fue encargado por los consejos de carne vacuna en Kansas, Oklahoma y Texas y fue escrito por el Dr. Derrell Peel y el Dr. Glynn Tonsor.
“Estados Unidos es un mercado relativamente maduro en términos de demanda de carne, pero hay mucho más potencial en el mercado global, en términos generales”, dijo Peel. “El crecimiento potencial en la industria se basará cada vez más en el sector comercial, y destacamos el hecho de que el mercado ha crecido mucho en los últimos 20 a 30 años”, agregó.
Las exportaciones e importaciones de carne se combinan para brindar oportunidades para aumentar el valor de la industria estadounidense mediante la exportación de productos que tienen más valor en los mercados extranjeros y la importación de productos que pueden obtenerse de forma más económica en los mercados internacionales.
Estados Unidos importa un producto muy diferente al que exporta y recibe un valor de US$ 2 por kilo más alto por las exportaciones, lo que genera una ganancia económica neta.
Las investigaciones indican que una reducción del 10% en las importaciones y exportaciones de carne vacuna en 10 años daría como resultado un impacto de US$ 20.000 millones en los productores de ganado.
Si bien el comercio internacional puede no parecer paralelo al comercio interno, el informe detalla que la actividad de compra y venta se trata de buscar valor y la asignación eficiente de recursos. La principal diferencia en el comercio internacional es que dos gobiernos están involucrados en la determinación de las reglas de acceso y bajo las cuales ocurre el comercio.
Un cese en el comercio de carne bovina sería catastrófico para la industria ganadera. Una pérdida del 100% del comercio de carne vacuna resultaría en una pérdida de US$ 129.000 millones para los corrales y de US$ 68.000 millones para los vendedores de ganado gordo, lo que reduciría el tamaño de la industria.
Si bien las importaciones y las exportaciones no están muy relacionadas, el principio básico de la reciprocidad comercial dice que no debemos esperar poder exportar si no permitimos las importaciones.
En los últimos 20 años, las importaciones de carne vacuna han promediado 1,326 millones de toneladas. Antes de 2017, Estados Unidos era el mayor país importador de carne vacuna antes de ser superado por China.
Entonces, ¿por qué el país productor de carne vacuna más grande del mundo importa carne vacuna? Las empresas que importan carne obtienen productos específicos que son más caros en Estados Unidos, que no se producen en el país o que no están disponibles debido a suministros limitados.
Según el informe, el mayor impulsor de las importaciones de carne vacuna es el mercado de la carne picada. La carne molida, de hecho, representa casi la mitad del consumo total de carne vacuna en los Estados Unidos. Los recortes o cortes primarios importados complementan los suministros nacionales de carne magra procesada.
¿Qué productos importa Estados Unidos?
Las importaciones de carne vacuna de Estados Unidos se enfoca en productos específicos, importados de fuentes específicas, para usos específicos. El principal impulsor de la demanda de importación de carne vacuna es el mercado de la carne picada. Una demanda que no ha hecho más que aumentar en base al mercado de hamburguesas.
Entre 2016 y 2020, el 51% de las importaciones de carne bovina de Estados Unidos fueron carne procesada o recortes, el 21% de las importaciones fueron de productos primarias o subprimarias, 18% adicional eran cortes, el 7% productos cocinados y el último 3% correspondía a despojos comestibles.
Los principales países proveedores de carne vacuna durante ese período fueron Canadá: (29%), Australia (22%), México (19%) y Nueva Zelanda (16%).
Exportaciones de carne vacuna de Estados Unidos
El papel económico de la exportación de carne vacuna y de variedades es sustancial y creciente para Estados Unidos. En 2021 alrededor del 22% del valor del ganado alimentado se atribuyó a las exportaciones.
Los datos incluidos en el informe sugieren que las exportaciones e importaciones de carne vacuna trabajan juntas, para maximizar el valor de la producción de carne y del ganado de Estados Unidos.
Fuente: AG Daily.
¿Qué lectura hace de este momento del mercado?
Lo de estas semanas no es algo que se pueda analizar de manera tan puntual. Pasan cosas en el mundo, que de repente tienen consecuencias inmediatas. Si bien hay una reducción de precios, estoy convencido de que estas son situaciones de mercado, bien coyunturales.
Estoy convencido de que hay un cambio mucho más estructural en la demanda, en el mediano y largo plazo. Hay que considerar que estos precios no son para nada malos, pero seguramente esta tendencia a la baja en algún momento cambie.
Seguramente influye determinada presión de demanda, la situación climática, así como otras situaciones en los principales mercados donde Uruguay vende su carne, que dan este tipo de resultados. Pero esta no es una situación para nada preocupante.
¿Se justifica esta baja de precios por la menor demanda de China?
Creo que no. Esto es oferta y demanda, y es mercado libre. En el mercado libre pasan estas cosas. Quizás la demanda se retira un poco y la oferta se pone un poco más nerviosa, por eso ocurren estas situaciones.
Aquel que no le sirve el precio puede optar por no vender, pero en un sistema productivo, donde las cosas están concatenadas unas con otras, uno no define el momento de venta, cuando el ganado está pronto uno tiene que venderlo y listo.
En mi trabajo profesional siempre digo que es muy difícil apuntar al mejor precio; hay que apuntar a un buen promedio. Esto es lo mismo. Hay gente que ha vendido ganado a mejores precios. Es difícil apuntar siempre a la punta de arriba, lo que hay que evitar es estar en el piso de precios.
Son juegos de oferta y demanda, que han existido siempre. Pero hay movimientos mucho más fuertes en el mundo, que se han copiado acá. Hubo shocks enormes en la demanda y en la oferta de carne. Y tenemos que acostumbrarnos a estas movidas, tanto hacia arriba como hacia abajo.
Pero rescato que tenemos una línea de base bastante más alta que la que teníamos anteriormente. De todos modos, creo que las variaciones de precios que se han dado en China no están de acuerdo con la baja de precios que tuvimos a nivel local.
¿Confirma un freno de la demanda de carne por parte de China?
Si bien es cierto que hubo situaciones puntuales de menor demanda, inciden otras cosas, como la política de covid cero en China, que paraliza a las ciudades y es bastante difícil para el importador planificar las compras.
Hay restaurantes que quedan con carne comprada, porque se cerraron las ciudades. Es bastante complicado manejar esa situación.
También es cierto que han pasado otras cosas a nivel regional. Brasil está con más carne, con precios bastante más baratos, lo que seguramente tendría incidencias en el precio de venta de Uruguay.
Además Uruguay exporta el 80% de su producción, y depende básicamente del precio de exportación. A los otros competidores de Uruguay les pasa totalmente lo contrario, exportan excedentes y el precio del ganado lo fija el mercado interno. Esa es una diferencia trascendente en este momento.
¿Cuánto pesa el déficit de lluvias y retraso de las pasturas en esta situación?
Todo está en juego. En la región donde trabajo (este de Uruguay) vimos que las pasturas que se instalaron temprano tuvieron un buen empuje hasta agosto. Los verdeos más tardíos no tuvieron buena implantación y desarrollo. Hoy la situación no refleja lo que es la primavera, por efectos climáticos anteriores, y por la primavera actual.
No hemos tenido lluvias acordes al momento. Aunque no estamos en una situación de sequía, sino de déficit hídrico, que es diferente. También juegan los pronósticos, que no prevén lluvias. Y todo eso puede generar alguna distorsión en los esquemas productivos de algunos predios.
¿Cuáles fueron los cambios más notorios que tuvo la ganadería en los últimos años?
Hubo dos o tres cosas que han sido muy relevantes, sobre todo en los últimos cinco años. Uruguay bajó muchísimo la edad de faena; ese es un cambio muy relevante. La mayoría de los novillos faenados son jóvenes y ese es un claro ejemplo de eficiencia. También aumentó el peso de faena de las vacas y novillos.
Además hay cambios en la cría, que se están gestando y quizás no han explotado aún. Aumentó el número de terneros, porque aumentó el número de vacas entoradas. Estoy convencido de que hubo una mejora de algunos procesos en la recría, que impactarán pronto.
Hay una adopción de tecnología de procesos en el sector criador, que ha ido mejorando no solo la cantidad de terneros producidos sino también la eficiencia en la producción, considerando las vacas entoradas y los terneros logrados.
Este es un cambio tremendamente lento. La cría es una producción con ciclos biológicos y procesos muy lentos, que está en los suelos más marginales, donde la gente está bastante más aislada, y eso ha dificultado la transferencia de conocimiento para hacer mejor las cosas.
Creo que Uruguay tiene un debe enorme en la transferencia tecnológica. Desde la CNFR lo venimos diciendo desde hace mucho tiempo, y creo que Uruguay tiene que encarar un plan ganadero, vinculado a la cría, a nivel nacional.
Nos parece que Uruguay tiene tecnología y conocimiento generado, pero una de las grandes dificultades es la difusión de esos conocimientos y tecnología para mejorar aspectos vinculados con la producción de la cría, y que le darían a Uruguay un respaldo enorme, con mayor producción de terneros.
Siempre ha estado en consideración que la extracción que tenemos genera déficit de la cantidad de terneros, y creo que no. Porque la exportación de ganado en pie, que estuvo tremendamente viva hace cuatro o cinco años, generó certezas para la cría, y lo que le pone la moña es la alta faena que tuvimos en estos años. Todo eso hace que los precios de los terneros sean buenos, y ese es el mayor aliciente para los productores.
¿Este aumento de la extracción podría consolidarse?
En este año calendario vamos unos 80.000 vacunos menos que el año pasado. Son dos semanas de faena promedio. Uno puede decir que hubo una menor faena por un invierno tremendamente adverso, lo que también impactó en la oferta, a lo que se sumaron los problemas de implantación de algunas pasturas.
Pero también fue un invierno muy helador. En Lavalleja en el mes de junio tuvimos 10 milímetros de lluvia. No fue normal. No tuvimos barro en este invierno. Esa escasez de lluvias impacta en la producción de las pasturas. Todo esto influyó en una menor oferta de ganado gordo.
¿Cuáles son las alternativas para depender menos del clima?
Hay muchísimas formas. Desde nuestro trabajo a nivel privado, con productores criadores fundamentalmente, siempre hablamos de mantener una carga que no supere la oferta de pasto del establecimiento. Es una regla bastante básica, pero generalmente los sistemas están tirantes, con un poco más ganado que el que se pudiera mantener, eso genera dificultades en las posibilidades de reservas en pie, en campo natural.
En la medida que nos vamos a sistemas más intensivos, no cabe dudas de que Uruguay tendría que hacer más comidas y copiar a los sistemas lecheros. Pero también tiene que ayudar el recurso suelo, la capacidad de existencia de maquinaria en la zona, lo que también a veces es una limitante, porque no todas las zonas tienen disponibilidad de maquinaria para hacer todos los trabajos.
Cuando nos vamos alejando de centros poblados, que estamos lejos y tenemos dificultades de caminería, que no tenemos suelos agrícolas o donde podamos hacer una rotación forrajera, los servicios de maquinaria también son muy escasos, y eso limita enormemente la posibilidad de hacer pasturas. Entonces, no es solo la voluntad, sino la disponibilidad de recursos para poder hacerlo. En el caso de la cría existe tecnología vinculada a los procesos y a pasturas, que son mejoramientos extensivos, que tendrían que estar mucho más multiplicados en el sector.
¿Es un riesgo depender tanto del mercado chino? ¿Dónde ve oportunidades de diversificación?
Creo que China es uno de los cambios estructurales en la demanda, y hay que aprovecharlo.
Asia es un mercado potencial, que junto a China son el 58% del mercado importador de carne. Después tenemos algunos otros mercados, que no solo no son tan relevantes, sino que no van a ser relevantes.
Estamos convencidos de que el futuro del comercio está en Asia, no en Europa. Si comparamos la producción de esos países con la importación, vemos que en Europa se importa 9% de lo que se produce. China importa 40%, y Japón y Corea 60%.
Está claro hacia dónde tiene que apostar Uruguay. A países como Malasia, Vietnam, los países del Sudeste Asiático han aumentado su demanda por carne en la medida que la van conociendo, pero sobre todo hubo un aumento del ingreso per cápita, que les permite acceder a un producto como la carne.
Nos parece que en mercados como Europa o Estados Unidos, donde tenemos cupos que no se pueden levantar y los aranceles pasan a ser una dificultad, no están las oportunidades.
Brasil hoy representa el 5% de las exportaciones de Uruguay. Es un mercado que ha venido creciendo en los últimos años, no solo en volumen, sino que además es un mercado a donde se exporta carne de alto valor, de muy buena calidad, cortes caros.
Pero la alternativa es Asia. Es donde está la demanda y donde hay alto déficit del producto.
¿Cree que Uruguay podría llegar a concretar algún TLC o el ingreso al Acuerdo Transpacífico?
Las cartas están jugadas. También depende, en algunos casos de Uruguay, y después que te den el acceso. Pero no son situaciones que se logren de un día para el otro. Son procesos tremendamente largos, con juegos que no son solo políticos sino que también hay intereses de muchos países, que hay que considerar. Son cosas que llevan tiempo.
Cualquier acuerdo que mejore la capacidad de Uruguay de comerciar sus productos es bienvenido.
También hay que considerar las cosas en las que se puede ver afectado el país. Pero para eso está el sistema político.
Desde el INAC se dieron pautas sobre los beneficios que significaría participar de acuerdos como el Transpacífico. Es tremendamente atractivo para Uruguay, beneficioso para el sector y para todos los habitantes del país, y ojalá pueda entrar en vigencia.
¿Cómo imagina el futuro de la ganadería y del negocio cárnico?
Creo que Uruguay tiene el producto justo, de calidad excelente, en un momento de mucha demanda. El mundo no ha podido aumentar la producción de carne en los últimos 20 años, pero sí ha aumentado la demanda y el comercio entre los países.
Esas son señales claras, de que tenemos un futuro tremendamente auspicioso, con subas y bajas en las ofertas, demandas y precios.
Uruguay necesita seguir haciéndose conocer en el mundo, seguir invirtiendo en marca; y no tengo dudas de que la ganadería tendrá un futuro tremendamente auspicioso.
Las autoridades sanitarias de Rusia decidieron suspender temporalmente a las tres plantas industriales del Grupo Frigorífico Concepción, en Paraguay, como consecuencia de la detección de “sustancias prohibidas y nocivas” en los productos vendidos.
El cese de las exportaciones comenzó a regir el pasado 31 de agosto para una de las plantas, y el 2 de septiembre para los frigoríficos restantes, y desde el Servicio Nacional de Calidad y Salud Animal (Senacsa) se mostraron sorprendidos por la medida.
El presidente del Senacsa, José Carlos Martin, dijo a la 720 AM de ese país que sorprende la posición que tomó Rusia, y apuntó que desde el año 2018 las plantas paraguayas están recibiendo de Rusia una “política muy fuerte de suspensiones”.
“FrigoNorte quedó inhabilitado para Rusia sin haber faenado por nueve meses y sin mucha explicación del servicio oficial”, según remarcó de acuerdo a lo acontecido en el pasado.
Martin explicó, según el portal Valor Agro, que a principios de agosto se recibió de Rusia una comunicación sobre el hallazgo de contaminantes en productos exportados, sin especificar la sustancia y si fue en carne o menudencias bovinas. “Aumentaron los controles y posteriormente suspendieron a las tres plantas del grupo”, comentó.
Las autoridades rusas indicaron que los residuos en las cargas corresponden al dietilestilbestrol. “Niego rotundamente que sea ese producto, porque no está registrado en Paraguay ni existe registro en el resto de los países del Mercosur”, remarcó en la entrevista el presidente del Senacsa.
Aseguró en ese sentido que la comunicación con Rusia es cada vez más difícil desde que cerraron la oficina de servicios para Sudamérica que estaba en Buenos Aires. “La comunicación se volvió difícil, primero por la barrera del idioma y después por toda la burocracia extra que siempre nos imponen”, apuntó.
Destinos
Por otro lado, Paraguay continúa siendo el principal proveedor de carne vacuna de Chile, pese a que el país andino importó 45% menos de la proteína roja en julio y la producción semestral bajó, según los datos exteriores de la Oficina de Estudios y Políticas Agrarias (Odepa).
En cuanto al comercio exterior, Chile importó 51,4% menos de carne de cerdo (42.341 toneladas) entre enero y julio del 2022, mientras que las importaciones de carne vacuna cayeron 12%, a 135.669 toneladas. Paraguay lidera la lista como el principal proveedor de carne vacuna con el 53% de las importaciones, le siguen Brasil y Argentina, con 30% y 9,2% de participación, respectivamente.
En julio se importó un 45% menos de carne vacuna que en el mismo mes del 2021. Chile es el principal importador de carne vacuna de América del Sur.
Respecto a las exportaciones chilenas, de enero a julio sumaron 14.270 toneladas en caso de la carne vacuna, un 38,9% más que en 2021, pero bajaron un 18,6% las de carne porcina. Entre enero y junio del 2022, Chile produjo 96.175 toneladas de carne bovina, mostrando una reducción del 12,2% sobre igual período del año pasado, según la Odepa.
Fuente: La Nación Paraguay.
Este lunes 25 de julio la Asociación de Consignatarios de Ganado (ACG) realizará su reunión semanal de precios en la ciudad de Salto. La actividad se llevará a cabo en parrilla El Portón, ubicada en Rambla Costanera Norte 5.000.
La convocatoria es para la hora 18, cuando comenzará la reunión de precios, y a continuación, desde la hora 19.30, se realizará una presentación a cargo del Dr. Gastón Borderes, médico veterinario de la provincia de Corrientes, Argentina. La charla se titula “Manejo de la garrapata en el rodeo, para evitar la resistencia y su ciclo biológico”.
Esta será la segunda de cuatro reuniones que ACG definió realizar este año en el interior del país, para acercar la institución a sus socios de las distintas regiones, así como a los productores y demás actores de la cadena cárnica.
Otro de los objetivos es que se conozca de primera mano cómo se realiza el análisis del mercado, en base a los negocios realizados por los consignatarios en la semana previa al encuentro, así como el cálculo de los precios de referencia, tanto en el mercado de ganados de reposición como de la hacienda que se envía a faena.
Cabe recordar que la primera reunión de este año en el interior, se celebró el 23 de mayo en Rocha. Aquí los detalles de esa reunión.
Un nuevo informe de Research Dive muestra que el mercado mundial de productos cárnicos sigue creciendo, a pesar del aumento de las carnes de origen vegetal .
Se espera que el mercado genere ingresos de US$ 387,6 mil millones y crezca 3,95% de 2022 a 2030.
Un informe reciente encontró que se espera que el mercado global de carnes congeladas alcance los $ 27 mil millones para 2030.
“Con la creciente demanda de productos cárnicos listos para comer, con altos valores nutricionales, sin comprometer el gusto y el sabor del producto, se espera que el mercado de productos cárnicos experimente un crecimiento significativo durante el período de pronóstico”, informó Research Dive.
“Además, se espera que la demanda de productos cárnicos congelados, por parte de los establecimientos de comida rápida y los restaurantes de todo el mundo para sus operaciones, aumente aún más el crecimiento del mercado durante el período de análisis”, señala el documento.
También se espera que una mayor adopción de carne procesada entre las personas, debido a sus estilos de vida ocupados, lo que genera oportunidades de crecimiento masivo para el mercado de productos cárnicos durante el período de tiempo estimado.
Por tipo de carne procesada, se prevé que el subsegmento de hamburguesas sea el más lucrativo, y que genere ingresos de US$ 169,700 millones durante el período de análisis, según Research Dive.
Citan la vida acelerada y el creciente desarrollo de múltiples franquicias como predictores para fomentar el crecimiento del subsegmento del mercado durante el período de tiempo estimado.
Por tipo de carne, se espera que el subsegmento de carne de cerdo sea el más rentable y se proyecta que obtenga ingresos de US$ 149.5 mil millones de 2022 a 2030. La carne de cerdo, al ser una buena fuente de proteínas y lípidos y la elección de carne en las cadenas de comida rápida y restaurantes, se espera que impulsen el crecimiento del subsegmento del mercado durante el período de pronóstico.
Se espera que la creciente demanda de alimentos listos para el consumo que están disponibles en forma refrigerada para almacenamiento indefinido impulse el crecimiento del subsegmento del mercado durante el período de análisis.
Por región, se espera que Europa genere ingresos de US$ 142,6 mil millones durante el período de análisis. Se prevé que la creciente demanda de alimentos procesados ricos en proteínas entre las personas de esa región impulsará el crecimiento del mercado.
Un importante organismo de la industria cárnica australiana está pidiendo al gobierno federal que recomponga su relación con China luego de otra prohibición de exportación.
Al gigante de procesamiento de carne Teys Australia se le revocó la licencia de exportación de sus instalaciones de Naracoorte en el sureste de Australia Meridional.
El director ejecutivo del Australian Meat Industry Council, Patrick Hutchinson, dijo que era necesario solucionar el problema. “El momento para una mejor relación con China es ahora”, dijo.
Hutchinson sostuvo que la falla en la comunicación fue perjudicial para la industria. “Debido a que no tenemos un diálogo con China, en el momento que tuvimos en 2019, cuando ocurren estos problemas, no lo sabemos hasta que ingresa al sitio web de aduanas de sus administraciones generales”, explicó.
Asientos vacíos en la mesa
El ministro federal de Comercio, Dan Tehan, dijo que el gobierno estaba haciendo todo lo posible para restablecer los mercados.
“Hemos pedido a las autoridades chinas que sigan los procesos y procedimientos adecuados que sigue la mayoría de los países, especialmente cuando se trata de brotes de COVID en establecimientos de carne”, dijo.
Con la guerra comercial en su segundo año, el gobierno federal está en negociaciones con otros países para llenar el vacío dejado por China. “Es por eso que el Acuerdo de Libre Comercio del Reino Unido fue tan importante”, dijo Tehan.
“Es por eso que seguimos trabajando en un Acuerdo de Libre Comercio de la Unión Europea, mientras he estado en negociaciones semanales con mi homólogo indio sobre un Acuerdo de Libre Comercio”, informó.
Los nuevos mercados no son suficientes
Hutchinson dijo que antes de que comenzara la pandemia, Australia exportaba 300.000 toneladas de carne vacuna y 100.000 toneladas de carne ovina a China cada año.
El comercio de carne roja tenía un valor de $ 2,16 mil millones anuales y Hutchinson dijo que los mercados adicionales no compensaron el déficit.
“La cantidad de producto que enviaríamos al Reino Unido en el primer trimestre aquí es menor que la participación de mercado que hemos perdido en China”, admitió.
“Creo que, a medida que avanzamos por este camino, la reintroducción de un mejor comercio y el levantamiento de las suspensiones temporales serán buenas noticias para varios procesadores y también para los agricultores que los abastecen”.
Fuente: ABC Rural / Por Megan Hughes y Laura Mayers
Este martes el gobierno de Egipto informó al Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP) que todas las plantas de faena de las especies bovina, ovina y aviar que fueron auditadas en forma presencial en los meses de noviembre y diciembre de 2021, fueron habilitadas para exportar carne a dicho país.
En total fueron aprobados 23 establecimientos, 15 de los cuales faenan bovinos, siete bovinos y ovinos y uno aves.
Esta renovación es el resultado de un intenso trabajo que se realizó entre técnicos de los Servicios Ganaderos del MGAP y las autoridades sanitarias del país africano, así como también los equipos de cancillería de ambos países.
Esta noticia augura un pronto retorno del comercio de productos cárnicos hacia este destino y es una clara señal del excelente relacionamiento que existe hoy entre las dos naciones.
Fuente: MGAP.
El acceso de la carne vacuna y ovina australiana al Reino Unido se liberalizará con la firma de un acuerdo de libre comercio entre las dos naciones.
El ministro de Comercio, Turismo e Inversión de Australia, Dan Tehan, y la secretaria de Estado de Comercio Internacional del Reino Unido, Anne-Marie Trevelyan, finalizaron el TLC Australia-Reino Unido, acordado en principio por los primeros ministros Morrison y Johnson en junio.
Australia estará ahora en una mejor posición para ayudar a satisfacer algunos de los requisitos de importación del Reino Unido para carne vacuna, ovina y cabra de alta calidad, dijeron los líderes de la industria de la carne roja.
“La firma del TLC solidifica una asociación ya cercana entre los dos países”, dijo Andrew McDonald, presidente del Grupo de Trabajo de Acceso al Mercado de Carne Roja Australia-Reino Unido.
“Australia y el Reino Unido tienen una larga historia de comercio, siendo el Reino Unido un comprador leal de carne de bovina y ovina de Australia, aunque en pequeños volúmenes”, señaló.
McDonald sostuvo que “bajo el TLC Australia-Reino Unido, el comercio futuro será más ágil, eliminando costos onerosos de la cadena de suministro de carne roja que, en última instancia, perjudican a los consumidores británicos y sofocan las oportunidades de desarrollo del mercado”.
“El TLC también representa una oportunidad para que los exportadores australianos y británicos diversifiquen aún más sus mercados y demuestra el compromiso de ambos países con el comercio abierto basado en reglas”, remarcó.
El acuerdo, una vez ratificado, dará lugar a que las exportaciones australianas de carne de vacuno y ovino ingresen al Reino Unido bajo un régimen de cuotas arancelarias, con tonelajes iniciales de contingentes arancelarios que irán aumentando gradualmente durante un período de transición de 10 años. El producto dentro de las cantidades de contingente arancelario ingresará sin aranceles.
Si bien no habrá un régimen de contingentes arancelarios después del año 10, se aplicará una disposición de salvaguardia de volumen hasta el final del año 15, después del cual no se aplicarán salvaguardias.
Fuente: Farm Weekly.
El rubro de existencias de carne de origen vegetal, que incluye empresas que producen carne de origen vegetal e ingredientes veganos relacionados, tuvo un rendimiento de aproximadamente 2% en lo que va del año en el mercado bursátil.
Ese rendimiento es considerablemente inferior al S&P 500, que tuvo un rendimiento de alrededor del 23% en lo que va del año.
También hay que considerar que ha tenido un rendimiento inferior a lo largo de la pandemia Covid-19, aumentando casi 13% desde febrero de 2020, en comparación con el S&P, que subió casi 56%.
Hay dos tendencias generales que podrían estar impulsando el bajo rendimiento reciente. En primer lugar, el aumento de la inflación fue una preocupación real para los productores en los últimos meses.
Aunque la mayoría de las empresas del rubro se ocupan de productos básicos, los precios más altos podrían al menos afectarlas a corto plazo.
Además, Beyond Meat, que se considera una especie de referente en el espacio de la carne a base de plantas, se orientó hacia ingresos más débiles de lo esperado para el tercer trimestre de 2021, debido al reciente aumento de Covid-19 debido a la variante Delta y problemas de distribución. Es probable que esto también haya afectado al sector.
Sin embargo, hay un par de tendencias que podrían impulsar el rubro en el futuro. La mayoría de las acciones se negocian a un múltiplo P / E relativamente bajo y es posible que puedan beneficiarse a medida que los inversores pivoteen para valorar las acciones a medida que suben las tasas de interés.
Además, la oportunidad de mercado para la carne de origen vegetal también es enorme, dado que el mercado mundial de la carne se sitúa en alrededor de US$ 1,4 billones de dólares.
La captación de carne de origen vegetal, que representa menos del 1% del mercado cárnico, podría aumentar, dadas las crecientes preocupaciones sanitarias y medioambientales asociadas con las proteínas animales.
Las acciones de Tyson Foods han tenido el desempeño más sólido, con un aumento de aproximadamente 36% desde principios de enero. La compañía, que es uno de los procesadores y comercializadores de pollo, carne vacuna y cerdo más grandes del mundo, ingresó a la categoría de proteína vegetal en 2019, con su marca Raised & Rooted.
Por otro lado, las acciones de Beyond Meat han sido las de peor desempeño, con una caída de aproximadamente 20% en lo que va de año.
Fuente: Forbes.